Monday, September 10, 2012


En memoria de mi padre, suegro y suegra gallegos. No amasaron fortunas pero nos permitieron vidas hogadas, y disfrutamos también de los aspectos musicales y culturales.
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¿Los futuros indianos tendrían alguna idea de que saliendo de sus aldeas en Galicia, Asturias, Cantabria, País Vasco, Cataluña y Canarias, que viajando a través del mar en busca de mejores horizontes, de situaciones afortunadas, irían a amasar fortunas, convirtiéndose en acaudalados personajes, a los que se les reconocería con el nombre de indianos?

… Empezaría por la música, refiriéndome en primer lugar a las célebres Habaneras, melancólicas melodías, verdaderos retablos escritos que en muchos casos describieron la travesía en alta mar, luego la estancia en tierra desconocida, el amor a esas tierras que los acogieron brindándole lo más fructífero de ellas, la savia madre, su belleza y su sabiduría. Y por qué no también, a esos “Cantes de Ida y Vuelta”, donde se habla de los “zapaticos de a centén”, de “la china que yo tenía cuando la volveré a ver, era una manzanillera, que me dejó de querer, yo la vi, yo la vi, yo la vi, y ella no me vio, estaba comiendo mango, sentada en el Malecón”, y así en ese estilo.

En la música ha sucedido una cosa bien distinta, la música cubana trascendió de manera insospechable en España, sin esos remilgos y renuencias frente al lenguaje. Me gustaría citar dos ejemplos –habrá más seguramente- de “indianos al revés”, de trayectoria a la inversa, de cubanos que pudieron a través de la música enriquecer al público europeo, eminentemente al español, que consiguieron que las letras de sus interpretaciones pasaran y fueran recordadas como pura poesía del amor y lo romántico, lirismo de altísima y también mediana calidad, gracias a la majestuosidad de una música mestiza, que también es indiana, y que empezó haciendo su viaje de ida y vuelta con la célebre Ma Teodora, que se fue para allá con la rumbilla flamenca y retornó hacia acá perfilada por el guaguancó, el son, el bolero y la guaracha…

Fuente: El sentido amoroso, cultural y artístico de lo indiano. Zoé Valdés ¡Libertad y Vida!